Sunday, September 11, 2011

Hoy no sé qué escribir; no tengo más amores, ni batallas ni victorias que presumir. Me he quedado sin cuentos y memorias, estoy en blancos. O en negros, dependiendo de la teoría. Y bueno ¿qué hago? deberé buscar un hobby nuevo, algo con encajes talvez. Menos tinta, más acción. Menos hilo más tijeras. Es que toma un rato hacerse. ¿Y deshacerse? Anda, toma el descosedor, saca puntada por puntada hasta que los pedazos que soy queden regados por la habitación. Yo por mientras uno las hojas para que alguien escriba las vidas que no puedo contar además de las que no vivo. Cuadernos blancos de por vida.
Hay que hablar de amaneceres y no de días. Pero si no abro los ojos no amanece, se pasa el día y hay más tiempo. Hay más noches y más soledad y más silencios. Y una línea más en el calendario y un cuadro menos que tendré que pasar. Imagino un marco sosteniendo al universo y las líneas de los años dividiéndolo. Es una gran cadena de ADN unida con listón. Y en medio de ella, nosotros.
¿Cómo cerrar?